Sunday 1 May 2011

Sábado 30-04 *Cumpleaños de Evelien


Para llegar a Amsterdam Arena tomamos un tren que, aparentemente, va hacia la periferia de Amsterdam, hacia la zona sur. Allí había dejado el coche estacionado Onno (durante el Día de la Reina hubiera sido imposible encontrar donde dejarlo en el centro).

Esta es una ciudad muy nueva. Onno calcula que no debe tener mucho más de 10 años. Está construida sobre terrenos donde antes había agua. Se logró el relleno con muchísima arena y hoy es una ciudad muy moderna y completa, con negocios y calles anchas y bastante rectas, gracias a Dios…

Obviamente, no ocupa mucho espacio desde el canal; sólo unas 2 ó 3 cuadras de ancho, pero varias de largo.

Por supuesto, la carretera de acceso es buenísima. Hay acceso a Amsterdam Central por tren, tranvía, micro o por coche.

Los edificios son todos de líneas similares, de la misma altura, con fachadas muy parejas. Son como bloques de 2 ó 3 pisos. En la parte inferior, adelante, tienen como pequeños patios abiertos (algunos con pasto artificial), con sillones, mesas, juegos, adornos. Es como si parte de la casa (como una sala) estuviera abierta al público. Los fondos dan al canal, que aquí es enorme, de modo que la vista es fantástica. Da la sensación de que no debe existir el menor temor a la delincuencia, porque todo está expuesto. Siempre flores, jarrones, adornos, bicicletas de muchos modelos, algunas para transportar 2 o más chicos.

La casa a la que fuimos (de Mirko, el mejor amigo de Onno) tenía en la parte de atrás salida hacia el canal, que aquí es muy grande, casi un lago, de modo que la vista es fantástica. Los ventanales eran enormes. Pero no me quiero imaginar el frío que se debe sentir en invierno… Es probable que esa agua se congele y los chicos, simplemente, en lugar de jugar en la parte de adelante lo hagan patinando en el hielo…

La familia de Mirko, está compuesta por su mujer: Evelien y sus dos nenas, adorables: Sanne de 5 años y Nienke, de 1 año y medio. Por suerte había dos personas que ya conocía, los padres de Mirko: Nelly y Hans, lo cual me alivió bastante la integración.

En cuanto a la comida que se servía, cuando llegamos había patas de pollo hechas a la parrilla y papas fritas. Todos los niños (muchos) estaban comiendo eso. Sobre la mesa había quiché Lorraine y una salsa extraña con gusto a maní, en la que mojaban muchas cosas: papas fritas y otras cosas. Luego trajeron una especie de chorizos pero del grosor de una salchicha. Los probé y estaban buenos, pero por supuesto, no los mojé en la salsa de maní. Lo que más me gustó fueron unos pinchos, tipo brochette, de pedacitos de pollo hechos a la parrilla. Otro detalle es que no hay "torta de cumpleaños".

Pero lo más lindo de este día fue conocer a Sanne… Por algo Leti está tan enamorada de esta nena… Me produjo mucha angustia no poder comunicarme con ella, que hacía esfuerzos denodados por enseñarme a hablar en holandés. Hasta trajo un libro de cuentos de Blancanieves (Sneewwitje) y me mostraba letra por letra deletreándola, como si así yo pudiera darme cuenta de cómo se dice “Blancanieves” en holandés… Yo le decía “ja!!!” (si) y acompañaba mi afirmación con movimientos de cabeza…, pero ella insistía en que yo repitiera esos sonidos complicados. Era tan cariñosa que poco a poco se fue acomodando más encima mío, como si me conociera de años. Creo que le daba pena mi incapacidad de comunicación… A Leti le dijo que yo hablaba diferente… Evidentemente entiende ya que existen otros idiomas. Me enseñó a decir “estrella” (ster), “mariposa” (flinder) y otras pequeñas palabras que no puedo recordar ya que mi memoria dijo STOP!!! NO CABE MÁS NADA…




Leti le agarró las manitos mientas ella seguía en mi falda y le dijo en holandés (que por supuesto no entendí pero Leti me contó): "Mi mamá no habla holandés, habla castellano. Pero está muy feliz de conocerte y dice que sos una nena preciosa. Está muy contenta de estar acá con vos. Le das a mi mamá un besito y un abrazo?". Acto seguido, Sanne giró su cabecita rubia, me abrazó y me dio un beso.


3 comments:

  1. Te olvidaste de contar que probaste los pinchitos de pollo con salsa sate (tradicional de fiestas de cumple holandesas), y que...no hubo velitas!

    ReplyDelete
  2. Es verdad..., ya lo agrego!!!

    ReplyDelete
  3. Al final siempre te comunicas de una manera u otra!

    ReplyDelete